¿Por qué las mujeres negras importan?

Hoy 25 de julio es el día internacional de la mujer afrolatina, afrocaribeña y de la diáspora. Cuando me ponía esta camiseta para ir a la universidad, algunos me preguntaban por qué decía que las mujeres negras importan sí igual son mujeres como las demás.

Yo creo que las mujeres negras tenemos otras realidades que nos oprimen por el hecho de ser mujeres y negras, por ejemplo, yo durante muchos años me pregunté por qué aquel profesor se burló de mi en frente de todos mis compañeros cuando el moño que me había hecho mi mamá con tanto amor se había abultado y por qué mi compañero blanco me fastidiaba todo el día llamándome “negra carbonera”. A mis 11 años yo no entendía que estos comentarios eran absolutamente racistas y clasistas.

Lxs que leen esto pregúntense “¿Yo he vivido estas situaciones?”  si la respuesta es no, te invito a que continúes con esta lectura, sí es si, probablemente te sientas identificadx.

Este post lo dedicaré a decir por qué considero que las mujeres negras importan:

1)      Durante la esclavización los cuerpos de mis ancestras fueron violentados con trabajo forzado, violaciones, exhibiciones y exotización a la justificación de que no tenían humanidad. Actualmente se lucha y resiste por la dignidad de nuestros cuerpos.

2)      Nos enseñaron a odiar lo que somos, nuestro pelo, nuestro cuerpo, nuestra piel y sobre todo nuestras prácticas culturales, esto hizo que nos viéramos en la dolorosa necesidad de “acomodarnos” a los patrones de belleza eurocentrada para sobrevivir.

3)      Somos sujetas de múltiples formas de opresión: la de raza/etnia, de clase y género, entre otras, como orientaciones sexuales, identidades de género y discapacidades físicas. Estas nos han marginalizado, empobrecido y matado.

La conmemoración del día de la mujer negra, afrodescendiente, afrolatina y afrocaribeña es para recordarnos que somos importantes para la sociedad equitativa que tanto soñamos y que nuestros saberes trascienden en la construcción de nuestros territorios. Sin embargo, aún nos falta camino por recorrer para la exigencia de nuestros derechos y libertades. Seguimos en pie de lucha para que la discriminación, la pobreza y el machismo no nos siga matando todos los días porque nuestra existencia es resistencia.